domingo, 17 de agosto de 2008

DALLA COSTA CAMPEON

Dalla Costa derrotó ayer sábado a Panchester por 2 a 1 y se consagró campeón del Repechaje de la Liga Jujeña, torneo que cuenta con la mayor cantidad de equipos participantes (32), superando por más del doble a los que disputan las zonas A, B y C.
Es decir, Dalla Costa ganó el torneo más “popular” de la liga, ganando 5 partidos, uno de ellos por no presentación (a un equipo al cuál se derrotó por 5 a 1 en la fase previa).

La final fue pareja, ventosa y de mal juego. La pelota daba vueltas por el aire, incontrolable. El rival era prolijo y vertical de media cancha hacia delante, pero inseguro atrás. Y el albinegro? Tal vez nervioso, ansioso, conmovido, no acertaba con su buen juego. Y sin embargo, Hernán apuntó a la frente del arquero, tras un error de la defensa rojinegra, y fue 1 a 0, y llegó el empate. Y el primer tiempo acabó así, gestos contrariados: habría penales?
Martín Aparicio y Juan Gadea tocaban bombo y redoblante: en el banco había amigos y un DT taoísta; y Santiago salió al segundo tiempo, gladiador, y Bergoglio y su garra verde, como su pantalón.

Dalla Costa salió a jugar el segundo tiempo de una final: y como tal, tocó, olvidando emociones aversivas. Y Le Roux volvió a convertir, porque Hernán y Lucas son promesas agresivas de gol.
El partido fue tenso, arremolinado: el diez rival desequilibraba, pero no era punzante. Y por derecha e izquierda, buscaban un empate díscolo. Entraron Rolo y Hugo, el Facu se movía, alerta a las lesiones de los antiguos players, de músculos lisos y desbordados.
El Chelito, de arbitraje regular bueno, tomó la pelota y al fin Dalla Costa fue campeón: esto tiene que ver con todos los artículos anteriores, porque hubieron muchos partidos y pronósticos, y finalmente Dalla Costa ganó. Es decir, tantas variables independientes para este triunfo. Elevarse por encima de todos los salames base, que hacían un factor letal de cada instancia definitoria.

El albinegro recibió la copa y unos morlacos, y se fue al bar de la Valparaíso, donde a los gritos celebramos la victoria. Luego, llegó la hamburgueseada en la casa de Emiliano: por vez primera, se entonó el Himno de Dalla Costa. Era un coro Kennedy de botines roncos; era Trumpet con Arroquy invitando famosos a cantar.
Dalla Costa es campeón, al nivel que corresponde. Campeón es un mensaje de texto.
En este caso, la coherencia la pone la situación. Hubo pájaros muy contentos, y otro, muerto en el alambrado. Ni los hechizos maléficos detuvieron esta alegre amistad. David Gómez, llevó por primera vez el Tao a la victoria.
Para cuando el Tao del Fútbol, generoso inyector de confianza? (GIC). Generoso Inyector de Confianza (GIC).

No hay comentarios:

Publicar un comentario

COMENTARIO: