EL ESPIRITU DE LA EPOCA

Una combinación de ganchos, círculos, bocas rojas, lunares amarillos. Una manga en verde asomando por un pasillo negro, y unos papeles colgando desordenados de unas maderas que se van.

Una mirada si y la otra no, más atenta: el centrodelantero que vino de Trelew, que cursó en la Escuela Técnica, que va a convertir aún por elevación. Una pequeña repisa y un limón, las manchas a lo Miró.

Las barras que están detrás son los postes. Si mira hacia otro lado, el cabezazo va a salir afuera; o picándola, caerá sobre el travesaño...

EL ORO DEL AZUL

Cuatro jugadores de Dalla Costa: Gonzalo Marull (ingresado en 1994) , Matías Dreizik (1997), y los más jóvenes: Marcos Luna (2005) y Lucas Le Roux (2007).

Están Luz y Lorena Sol .

Hay una puerta azul y un grito de "Gaaalll" (Marquitos estuvo en Hungría); hay un perchero con forma de pato y hubo un antes, en la calle 12 de octubre, cuando la vereda estaba amarilla y vacía; Gonzalo llegó con un buzo en el hombro, y Lucas permaneció en un rincón, como en la cancha 2, cuando el tiro libre una y otra vez desencadena un festejo. Había sonrisas: Matías regresaba a su equipo de siempre; su primer gol fue con la camiseta verde, un 6 a 0, entrando entre los defensores de forma vertical.

SOBRE UNA PARED AMARILLA

En la foto se puede ver a Martín Polémica Pardo y a Santiago Redondo. Polémica tiene una mancha violeta en el costillar derecho, Redondo tiene la camisa abierta y una media sonrisa. Y tienen los brazos cruzados, como amigos, y hace tres años que se conocen. Los ladrillos a la vista limitan con franjas de otro color, humedad, una cinta naranja, un lugar en el fondo del Abasto. La chomba de Polémica tiene un cuello también polémico: inclinado hacia la derecha, y los ojos pequeños, y la mirada de Redondo que denota un más allá neurológico, un estoy acá, un provisorio tiempo de reencuentro.

El color de la chomba es triste y casero: el de Santiago es clásico, conservador. Se puede debatir entre modernos y medievales, y pensar que los últimos tenían razón.

La mejilla inferior inflamada, los dientes contraídos como chicles, las ojeras del día siguiente dibujándose incipientes. Y las edades, confundidas, porque son la columna vertebral del mismo equipo.

CONTINUIDAD Y PERMANENCIA

Un jugador de Dalla Costa observa, detenido con la espalda cruzada ante el mar, el pasar de Las Palmas, Traslasierra, La Tonada, Club Social, El Rejunte y más equipos que provisoriamente se armaron para disputar la Liga y por una u otra razón, desaparecieron, no juegan más.
Y Dalla Costa permanece, como una barba inclinada y una bufanda, caminando encogido; transmitiendo valores, regurgitando conceptos mentales, entre fiestas y nuevas ninfas, Dalla Costa es el águila y la serpiente que acompañaban a Zaratustra.

Este es el decimotercer campeonato, ya jugamos doce y ganamos dos, o sea el 16, 6% de los disputados. En el 2003 había un equipo que se llamaba Necaxa: en el 2002 jugábamos contra Portofino, San José y Los Perales, los más antiguos.
Salimos campeones siendo presidente Duhalde, en los partidos nos acompañaban Zoilo y Enrique y llegábamos en un colectivito que partía desde Boulevard San Juan: se disputaba en las canchas detrás del Easy de Barrio Jardín, un predio con un organista matinal, baños de chapa y una cancha inclinada hacia el oeste.

Pasamos a Juniors y a Cacho, y después a Juniors. Si Dalla Costa fuese un pullover, sería punto inglés, en el Mar de Irlanda, ante un oleaje escandinavo, con barcazas pequeñas hundiéndose sin gritos ni lamentos: hay cardúmenes de atún en el fondo del bravío mar y hay formaciones que varían con la luna: el 3- 5- 2 ante Los de Afuera, la adaptación ante los equipos que corren mucho, la superación de los desordenados.

Nos molestan los equipos quejumbrosos, que se expresan como desinencias de los pitazos del árbitro y admiramos a los equipos que llevan chicas desmechadas. Nosotros nunca llevamos más que a la Nani, y algunos autos. Se vienen las épocas de frío, los partidos con el trasfondo rosado y alguna escarcha medianera en las puertas del club.

SEGUNDA FECHA: DALLA COSTA 1 SIVORI- HURLINGHAM 1

Cuando un partido termina empatado la pregunta siguiente es: ¿quién mereció ganar? ¿Dónde estuvo la renuncia que condujo al equilibrio? Y automáticamente el observador dirá: Dalla Costa mereció mejor suerte; Dalla costa dominó; Dalla Costa tuvo muchas chances y algo de fatalidad. Este es el blog de Dalla Costa: qué diría un hipotético espacio del rival?

Seguramente, autorreferencias; hablarían de ellos mismos, se juntarían parcializando la realidad, tratando de disimular los centros recibidos con objeciones a la organización de las correlativas de la Facultad, en fin... tratarían de que Dalla Costa se les pase... Entonces, a mayor nivel de autorreferencialidad después de un empate, mayor la injusticia de haber logrado el mismo…

Este es al fútbol amateur: ayer domingo, llegando al mediodía, empatamos uno a uno, con un gol de tiro libre de Lucas Le Roux. Fue un golazo: divertido, liviano; la pelota superó la barrera sonriendo y cuando pasó la línea la red misma la esperaba con caricias de seda. La provincia de Jujuy quiere a Lucas Le Roux.
El equipo jugó bien y demuestra algo: ya tiene la base corteroide para enfrentar partidos, es decir: más allá que el rival sea X o Y la condición de juego plano la impone Dalla Costa, con desequilibrios aguja y con solvencia piramidal.

La defensa es un poema uruguayo: buenas personas que se desviven por el bien de todos. Son campesinos de la reforma agraria.
No es de extrañar que el alfajor de oro lo haya obtenido el Maxi Peralta. Era como ver a Galeano concretizando en quites lo que supo expresar con la palabra.

Nuestra defensa es la defensa de Danubio. Hombres de barba y mate. Asado en las sierras.

David Gómez nos dirigió con su habitual calma, preocupación y sabiduría de hombre de bien. Todo un ejercicio clínico para un tipo que, encima, lo tiene que hacer toda la semana.

LA COMBA RICHMOND

Alejandro Gimeno es el principal ejecutor de las combas tipo Richmond, que supieron desarrollar con maestría Walter René Fernández, Jorge Comas y Alejandro Montenegro en la década del ´80.

Es una comba solidaria que sólo pueden aplicar quienes desbordan como wines, proyectándose en velocidad, y lanzando a un punto cercano al área o dentro de la misma un obús de trayectoria irregular, con descenso vertiginoso sobre el alma palpitante del delantero receptor.

Roberto Carlos, hoy en Turquía, maneja dos tipos de combas: La Experience Troyana y la Richmond. En nuestro equipo, el sanjuanino de barrio Jardín la trabajó en Desamparados y ahora la plasma en las canchas de Barrio Juniors.

En septiembre hay unas Jornadas Nacionales de Comba Richmond en Venado Tuerto, donde disertará el negro Palma, entre otros. Gimeno (2007) presentará su trabajo:

"Aplicación de la comba Richmond en un grupo de futbolistas amateurs de reconocida lentitud para darse cuenta donde va a ir la pelota: Incremento de sus beneficios y perspectivas evolutivas de su eficacia"

¿Cómo darse cuenta que la comba es Richmond y no otra?

- La cara del que la ejecuta se ilumina: al patear, los ojitos brillan, por un segundo. Es un momento asesino- lata, donde el defensor pasa a ser un algarrobo estéril

- La pelota cae "a lo Riquelme" en el área, provista de una especie de inteligencia de cuero. Con solo tocarla, se queda mansa en derredor del corazón más fuerte. es una comba que mira más lo de adentro que lo de afuera

- Independientemente de sus resultados, es una amenaza poblacional; la comba Richmond es un alga japonesa que al llegar a las costas de Sudamérica sabe que ya nada va a ser igual

Y una fórmula: equipo que mete tres combas Richmond, equipo que temprano se va al sobre

PRIMERA FECHA DEL TORNEO APERTURA: DALLA COSTA 5 : KLAN DEL FELPA 0

Empezó el Torneo Apertura de la Liga Jujeña y Dalla Costa derrotó por 5 a 0 al Klan del Felpa de Río Cuarto. Los goles (4 en el primer tiempo) fueron convertidos por Hernán (2), Julián (2) y Ale Gimeno, que utilizó la comba Richmond en repetidas oportunidades.

Rolo Allemañi (alfajor de Oro) fue el símbolo del primer tiempo: toques rápidos, desconcierto veloz y contundencia; mientras Hernán penetraba la defensa con potencia, Maxi y Santi rechazaban centro y salían a cortar con la intención de generar juego; Emi pegó una fuerte patada por placer y repetía: “a mi me gusta” y miraba al banco, y su pantorrilla quedó lastimada.
Polémica Pardo tenía cuentas pendientes: habían lastimado su honor, y la de su amigo el Gonza. Y eso había originado más de un sueño punitivo, charlas marrones, deseos de lluvia fría. Ale Gimeno marcó, cruzó y se proyectó como el Roberto Carlos de Cuyo. El árbitro, Quique, había quedado sensible después de la cacofonía frente a Merengues. Los jueces de línea también escuchaban los constantes quejidos del equipo del sur de Córdoba, que decían:

- árbitro, usted nos perjudica
- siempre cobra para ellos, que nos lastiman
- ellos podrían ser nuestros padres…

Argumentaciones repetidas, tonadas variadas, la misma canción, de protesta, de impotencia. A veces hacemos lo mismo, pero nos vamos a corregir.
El número nueve verde, la estrella apodada Bruno Laucha, amonestaba a sus propios compañeros. Cuando un equipo se comporta así, es una especie de gol mental.
Hay quienes se relamen con una parrillada. Corta y precisa. En el segundo tiempo entraron Ariel, Marcos, el Fede, David, Hugo…

Sospechamos que tantos quejidos provocaron una inclinación en las decisiones del señor juez… lo sospechamos, sin darle tanta importancia. Después fuimos a Lugones y Plaza España, arrojados en un banco, y desde un Fiat Uno gris nos insultaron. Comíamos criollos, tomábamos gaseosas, y a través de las botellas se veían restos de una mucosa naranja y blanca.

En el historial vs. el verde de Río Cuarto, en cuanto a goles, llevamos una clara diferencia a favor.

En la foto, una imagen de Río Pico, al sur de la provincia de Chubut: Nalbandian pesca truchas allí, junto con extranjeros; es difícil llegar, pero Dalla Costa puede ir en el verano, alquilando cabañas, durmiendo sobre listones de madera.

MAÑANA SABADO A LAS 13 HORAS VERSUS KLAN DEL FELPA DE RIO CUARTO

Mañana sábado a las 13 horas en Juniors Deportivo Dalla Costa juega su primer partido oficial del año versus el Klan del Felpa de Río Cuarto. Frente al mencionado rival se han jugado varios partidos, siendo el más traumático el primero, ya que significó nuestra pérdida del invicto en la Liga Jujeña (2 a 0 en una tarde fría y desolada). Luego empatamos 1 a 1 el día de la despedida de Maxi a España, por lo que fue una noche triste que preanunciaba que cualquier persona está y después no está: es decir: Klan del Felpa= trauma.

En el último enfrentamiento perdimos 2 a 1, quedando en nuestro recuerdo las burlas sobre nuestro número ocho, la pisada gozadora del nueve de ellos, la extraña conducta de varios de sus jugadores que conversaban con su banco de suplentes y la dificultad para conseguir trabajo una vez finalizados los soportes institucionales básicos.

Mañana sábado, en este otoño, empieza el campeonato para el albinegro. Los pichones ya tienen plumas, el albatros despliega sus alas, habrá muchos cóndores observando el partido. El vino, por la tarde, conservará su calidad de pizza?

DALLA COSTA 4 : SIVORI/ HURLINGHAM 1

Entrando la noche, un sábado en que cambió el clima, Dalla Costa ganó 4 a 1, con tres goles de penal de Lucas Barrilete Le Roux y uno de “tijera descompensada” de Maxi Peralta.

El albinegro fue punzante y sólido, y tuvo un concepto de juego, que surgió de esa mente plena de recuerdos que habita a Martín Polémica Pardo. Hernán y el Fede fueron dos alfiles, agresivos y curiosos, movían los brazos como demandando avispas, atravesaban la defensa como un crucero que va a Inglaterra y sabe que no regresará.
La defensa tuvo la solidez muralla de siempre, con el agregado de un Alejandro Gimeno simpático, que metió un centro formidable, con comba “Richmond” para que Hernán la mate con el pecho y la jugada se pierda en aquello de “podría haber sido mejor, todo mejor”.

De qué nos arrepentimos? De que haya sido un amistoso. Cada uno cenó en su casa, y luego fue por lo suyo en la noche fría. A Dalla Costa ya se lo llama Cuchillo. O “la Cebra y la Cebolla”.

Lucas ganó el alfajor de oro, por la banda izquierda encara a los rivales y los supera con gambetas intermitentes. Luego tiene conversaciones misteriosas por celular: se le escuchó decir: “Ok, de las verdes y de las negras…” y luego: “mirá, si no llevan postre mejor ni vayan… sambayón, si, sambayón”.

Santi y Maxi ganaron todo de arriba, potenciado por los nuevos guantes de The Trumet Man: al finalizar el partido entonó una canción de cuarteto, cuando todos esperábamos un himno clásico. De todas maneras, a Cristian lo comprendemos y cuando él quiera tango, lo vamos a tener.

El domingo llovió y la euforia se fue yendo por las duchas que cada uno supo reparar del barro conseguido en la querida cancha 1 de Juniors. Mañana es el sorteo y estos son los resultados de verano de Dalla Costa:

3-0 vs. Barraca Vicuña
3-1 vs. Quilmes
1-1 vs. Merengues
4-1 vs. Sívori/ Hurlingham

Goleador: El barrilete (5 goles)

MAÑANA SABADO JUGAMOS A LAS 19 EN JUNIORS

El partido de mañana es trascendental: jugamos contra mas que un equipo, una forma de vida... ellos son los jóvenes exitosos, que copulan con las hembras de Nueva Córdoba; si por ellos fuera, moriríamos vírgenes: quién nos quiere? Poca gente; a ellos mucha: recibían leche Nido de niños y los amamantaron prodigiosas nanas italianas, y comían pan de soja y vieron ante sus ojos desfilar tractores... Y nosotros?? perdidos en las ciencias sociales, trabajando en telefonías móviles, mirando, desde panaderías con abejas como, aquellas siliconas relucientes se van a los brazos de nuestro rivales: mañana, en un partido de fútbol, podremos exhibir nuestros pérfidos sentimientos, y hacerlos visibles, mostrar lo peor que tenemos, dejar ver que fuimos hechos en la oscuridad de un motel de barrio´cerca de una terminal...

UNA NUEVA ESTRELLA

En una tarde de domingo, entre cambios de cancha a último momento, el Deportivo dalla Costa obtuvo el título de campeón del cuadrangular de verano, al igualar con merengues 1 a 1. por mejor diferencia de goles, habiendo obtenido ambos equipos 7 puntos, dimos una pseudo- vuelta. El festejo fue algo exagerado, ya que el torneo era mínimo, pero: ¿qué es un torneo grande a nuestro nivel? ¿Cuándo festejar y cuando no? Digamos, de ganar el torneo apertura o clausura de esta liga, que diferencia hay en la repercusión social cuando regresamos Nueva Córdoba, a los barrios, cansados y con el título a cuestas?
Los restantes equipos, una vez eliminados, ya ni saben quién juega, ni les interesa: muchos ni conocen el nombre de sus rivales, ni se interesan por su historia ni sus condiciones de formación… entonces:

Qué distingue nuestro título cuadrangular del supuesto mérito mayor de campeón del apertura?
Festejamos en una plazoleta, Cristian The Trumpet Man obtuvo el alfajor de oro y el gol lo hizo Lucas Le Roux, con un precioso tiro libre al ángulo.

Merengues tal vez jugó mejor y corrió más: nos impactará en nuestra auto percepción como equipo? Pero, cuando otro equipo sale campeón: de alguna manera nos duele? Entonces, le provocamos dolor a alguien siendo peores o mejores?

Dalla Costa, una nueva estrella, pronto dejará de hacer calor.

En la imagen se aprecia el escudo de Ghana; este país ha alcanzado un nivel de vida aceptable para radicarse allí: hay jugadores de Dalla Costa que aceptarían ir a cambio de comida, trabajo y una buena mujer.

DALLA COSTA GANO 3 A 1: REGRESO MAXI

Un sábado 5 de abril ocurrió el regreso esperado: Maximiliano Peralta, de vuelta en Argentina, lució la 10 del albinegro; también estrenamos las camisetas blancas con rayas horizontales negras y todo en una apacible tarde otoñal, ante el bravo equipo de Quilmes. La noche anterior varios jugadores protegonizaron una fiesta teatral cargada de diversión libidinal y alegría difusa: cantamos coros futboleros que desagradaron a las chicas, nos abrazamos como matones. Los goles los hicieron Hernán (2) y Lucas, que recibió la unánime ovación de: "Barrilete, barrilete... tenés yerba?" Teníamos ganas que termine el partido, comer hamburguesas, escuchar anécdotas, dejar por fin ese predio que tanto frío nos brindó el julio pasado. Mañana el deportivo, con un empate, gana el torneo de verano...

En la foto se puede ver a Tuma Tumi, horas antes de entrar de marcador de punta en el mencionado cotejo...