DALLA COSTA OTRA VEZ GANA SIN JUGAR

Ayer domingo por la tarde en una caravana de cuatro autos llegó Dalla Costa al predio de la Universidad Tecnológica situado camino a Alta Gracia, para disputar el partido correspondiente a la tercera fecha, frente al Taborda F.C.
Los jugadores llegaron cuarenta minutos antes y comenzaron a ponerse las vendas y a mirar las recortadas sierras azules que desde allí se pueden ver, más allá del viento y de las piedras que la cancha enviaba hacia arriba como remolinos del sur.
Cuando se acercó la hora de empezar a jugar no había rivales a la vista: entonces dalla Costa pateaba al arco, trotaba al azar por alguno de los corredores que quedaban entre las dos canchas, una fila desordenada de estoicos árboles y unas desperdigadas canchas de fútbol cinco.
El domingo iba ganando terreno, los árbitros llamaron al centro y solo el albinegro se presentó. Nos tiramos en un costado, otro grupo de defraudados de camiseta roja estaba disponible y se jugó un amistoso: Rolo convirtió un gol de taco.
Rolo es Taco Man.
Rolando Allemañi, psicólogo, de San Juan: una vez trepó un andamio, otras rescató una lora en un balcón y hace tres semanas se arrojó en parapente desde La Cumbre.

Ayer, domingo, dalla Costa ganó 1 a 0 un amistoso frente a Zona Roja: el gol lo hizo Rolo, de taco. La pelota viboreaba entre el área chica y la línea de fondo, el arquero salió como un zorro desordenado a buscarla y taco man corrió en dirección opuesta, señuelo psíquico, y luego asestó su taco final, cruzando toda la línea y guardándose en la pared derecha de la red.
Luego regresamos por la ruta y comimos criollos en la casa de David. El torneo Quilmes se disputa una vez por semana, pero el fútbol se espera cada minuto de jueves o lunes, aún por la mañana, en medio de los negocios y las razones económicas.

Sebastián Damsere, de un metro noventa, fornido, piel paraguaya soberbia argentina, pasea su boxer cada mañana mirando sus anteojos de sol y detrás, si una estudiante de odontología mira su perro. Que mea los cachorros de pino: las mismas sierras azules, el mismo viento de primavera…